A veces pienso que sentir esto por ti es tan productivo como levantarse a las dos de la mañana a rasguñar una ventana. Eres el ruido que molesta a todos menos a quien lo produce.
¿Seremos dueños de la paciencia? Hay ventanas cosquilludas, ventanas que sienten comezón, ventanas que piden una caricia a chirridos. No siempre es inútil rasguñar una ventana.
No siempre uno debe importunarse con el ruido. No estoy lejano, estoy atarantado, succionado por otro ruido menos agradable y más -como dirías tú- cubero. Está por ser destituido.
Resolver las 16 delegaciones me ha tomado mucho tiempo y algunas bajas. Pero la nave va.
Con calma. Te dejo un abrazo tibio para cobijar tu madrugada.
De regreso en la carretera mirando un cielo estrellado te recordé. Las luces de la ciudad, a lo lejos. Acompañado de ese cielo maravilloso, en silencio, una lágrima rodó por mis mejillas. Ayer, tan cerca, casi podía escuchar ese ruido en la ventana...
Otra vez aquí... Hoy soy la mujer que cría mariposas como una forma de amar al mundo. Hoy soy la madre de un hombre porque creo que hay esperanza. Hoy soy la educadora popular, porque sin posibles me es imposible respirar. Hoy soy la amiga que está dispuesta a decir "te quiero" aunque ya se sepa. Hoy soy la investigadora que no se aleja del aula porque cree en la praxis. Hoy soy la que hace unos años no podía vivir sin deshacerse de todo alimento que se llevaba a la boca y que lucha todos los días por mantenerse en pie a pesar de la enfermedad y a pesar de las miradas. Hoy soy quien está convencida de que entre la caña se esconde la vida, una muy dolorosa y casi invisible, pero que es necesario ir a buscar. Hoy soy quien va a derrumbarlo todo para construirlo otra vez piedra por piedra. Hoy soy la que lanza esta botella al Mar (sin maresía)... a ver qué eco encuentra.
Sucede que mientras hablo con las compañeras que más admiro, con frecuencia me encuentro con una misma historia: hay un hito, el de un amor lobo con piel de aliado. Hombres "reflexivos", "solidarios", "en deconstrucción" que no nos explican el mundo, pero nos dan su categórico punto de vista, no nos miran desde la superioridad intelectual, sino desde la "compasión cognitiva", y más aún, nos cuentan cómo es el amor revolucionario, ese que, curiosamente, les reporta más beneficio a ellos. Y no me entiendan mal, seguramente lo hacen desde lo que, en su imaginación es un lugar paritario, compañero y revolucionario. Sin embargo, cuando una decide decir "esto no es para mí" cuestionan nuestro propio proceso crítico y de deconstrucción. Al manifestar un deseo distinto al suyo, pasamos de personaje secundario de su narrativa a francas antagonistas. Resulta complicado conseguir la claridad y la fuerza para salir de tal enredo arácnido. Hay en...
¿Seremos dueños de la paciencia? Hay ventanas cosquilludas, ventanas que sienten comezón, ventanas que piden una caricia a chirridos. No siempre es inútil rasguñar una ventana.
ResponderBorrarNo siempre uno debe importunarse con el ruido. No estoy lejano, estoy atarantado, succionado por otro ruido menos agradable y más -como dirías tú- cubero. Está por ser destituido.
Resolver las 16 delegaciones me ha tomado mucho tiempo y algunas bajas. Pero la nave va.
Con calma. Te dejo un abrazo tibio para cobijar tu madrugada.
Túsabesquiensoy
De regreso en la carretera mirando un cielo estrellado te recordé. Las luces de la ciudad, a lo lejos.
ResponderBorrarAcompañado de ese cielo maravilloso, en silencio, una lágrima rodó por mis mejillas. Ayer, tan cerca, casi podía escuchar ese ruido en la ventana...
Te veo pronto, pronto ya.
Abrazos, besos mil.
Teamucho.
look. come here?
ResponderBorrarLOVE YA
qué bonito!!!
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