Sucede que mientras hablo con las compañeras que más admiro, con frecuencia me encuentro con una misma historia: hay un hito, el de un amor lobo con piel de aliado. Hombres "reflexivos", "solidarios", "en deconstrucción" que no nos explican el mundo, pero nos dan su categórico punto de vista, no nos miran desde la superioridad intelectual, sino desde la "compasión cognitiva", y más aún, nos cuentan cómo es el amor revolucionario, ese que, curiosamente, les reporta más beneficio a ellos. Y no me entiendan mal, seguramente lo hacen desde lo que, en su imaginación es un lugar paritario, compañero y revolucionario. Sin embargo, cuando una decide decir "esto no es para mí" cuestionan nuestro propio proceso crítico y de deconstrucción. Al manifestar un deseo distinto al suyo, pasamos de personaje secundario de su narrativa a francas antagonistas. Resulta complicado conseguir la claridad y la fuerza para salir de tal enredo arácnido. Hay en
Que bueno que escribas de vuelta, que es eso de "uste no puede acceder a menos de que sea lector invitado" ¿Y si yo me autoinvito?
ResponderBorrarPues yo tengo muchos problemas, pero contigo, nanais, jeje! Ande, también me saqué de onda con eso de la invitación, je.
ResponderBorrarSaludos. Gusto en volverte a leer. Vuelvo al ocio contigo y contigo es más bonito.
ResponderBorraray sí oye, yo ya sufría, sufría, no podía ser que de repente me diera por aparecer de nuevo en el blogspoterío y tú no estabas, sin ti lloraba, en fin, que bueno que ya estás de regreso, yo te cuento que ya se me pasó lo de ñora, ahora por eso seré ñoña así como tú (uy sí ya quisiera yo)pero bueno, hago mi luchita
ResponderBorrar¡abrazotes!
eeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee!!!!
ResponderBorrarYa pude entrar al bló.
Besos, siempre.
por cierto
ResponderBorrarlos perros chihuahueños no son de chihuahua, en realidad son de tampico porque son TAMPIQUEÑOS!!!
jajaja duh