Del otro lado ¿yo?

¿Crees que después del de ella, sigue mi sueño? Asumes que aquí te espero, descansando, formulándome ideas del futuro, con las ganas de abrazarte, con las ganas de que hoy no falte ni, el pan, ni la noche, ni el vino, ni tu mano. ¿Cuánta soledad crees que puedo aguantar sumada a la distancia? ¿cuántas veces crees que voy a repetir tu nombre hasta que lo escuches? ¿Esperas que mi vida se anule en esta espera absurda?

"Yo no soy el sueño que sueña, que sueña, que sueña; yo no soy el reflejo de una imagen en un cristal; a mí no me aniquila la cerrazón de una conciencia o de toda conciencia posible. Yo continúo viviendo con una vida densa, viscosa, turbia, aunque el que está a mi lado y el remoto, me ignoren, me olviden, me pospongan, me abandonen, me desamen."
Rosario Castellanos

Comentarios

  1. Mierda!!! Ya había escrito mi comentario y ahora se fue buah!!!! Era algo sobre bailar y la curiosidad por sus posteos. Amén.

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  2. Anónimo1:46 p.m.

    (va un poemín quespero blogger no deshaga. con él, un abrazo)




    Cada mañana, al despertar, resucitamos;
    porque al dormir morimos unas horas
    en que, libres del cuerpo, recobramos
    la vida espiritual que antes tuvimos
    cuando aún no habitábamos la carne
    que ahora nos define y nos limita,
    y éramos, sin ser, misterio puro
    en el ritmo total del Universo.
    Porque al dormir morimos sin saberlo;
    nos vamos al espacio en ágil vuelo
    sin perder la unidad que nos integra,
    y somos como somos: idénticos, sin cambio,
    extensos y desnudos
    como el azul en el temblor del aire.
    No extrañamos el cuerpo; no sufrimos
    la ausencia de la piel que nos cobija;
    somos como antes de nacer: etéreos,
    vivos en plenitud de firmamento
    y penetrantes como luz en sombras.

    Y nadie, cuando duerme, acaso piense
    que yace en los dominios de la muerte:
    porque el cansancio, apenas agonía,
    nos borra la razón,
    desciende con ternura nuestros párpados,
    apaga nuestros ojos,
    anestesia la carne y nos separa de ella
    para dejarnos vivos en el sueño.

    Y esta costumbre de morir a diario,
    sin dolor, sin sorpresa,
    natural como el agua
    que se deja atraer por el declive,
    no nos deja pensar que es una muerte
    cada vez que dormimos,
    y que, de cada muerte transitoria,
    aprende nuestro ser
    la verdad de morir su muerte eterna.

    (nocturno, elías nandino)

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  3. Anónimo1:47 p.m.

    -mira, q sí salió bien, otro abrazo-

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  4. Hola Mar bonita, saludando nomás. Me gusta venir y hallar tanta maravilla. Te dejo un abrazo.

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  5. Un poema de lo más lindo. Me gusta tu blog.

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  6. "¿cuántas veces crees que voy a repetir tu nombre hasta que lo escuches?"

    Esa pregunta se me hace tan familiar...

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  7. yo digO que escriBas canciones!!
    si serían canciones bien llegadOras :D
    que bOnito escriBes!!

    te KierO!

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