Espera a que sople el viento a favor


La vida se ha empeñado en agarrarme a patadas, a veces me acuerdo de cuando mi papá decía "unas patadas en la nuca a ver si así aprende", pero yo no sé si la vida cree que soy idiota o que, es patada tras patada.
Algunas cosas buena que he aprendido en estos días es:
1. Cuando te asaltan te va a salir más caro de lo que calculaste, espérate a reponer tarjetas, membresías, credenciales, licencia y lo que sea que trajeras y que afortunadamente se pueda reponer.
2. Méxcio va avanzando en materia de trámite, yo creí que iba a perder un día por trámite y no, ya casi acabo.
3. Mi banda sí es rete buen pedo, gracias a todos los que se enteraron y han estado tan al pendiente... LOS AMO.
4. Julieta tiene razón, esto de reponer las credenciales es como enfrentarse a uno mismo y a quien es ahora, no paras de pensar, "¡Tan bonita que era mi foto de la licencia!" y ahora tienes que agarrale el gusto a cómo luces y a los nuevos gestos y aires que has adquirido con los años.

Me pasa una cosa con la que me siento un poco más tonta de repente, hace poco escribía sobre el miedo a las alturas, cuando todo va tan bien que te genera la sensación de que un mal mayúsculo va a caer sobre ti; curiosamente, ahora tengo la sensación inversa, todo lo que estaba bien se arruinó de forma tan contundente que tengo el pálpito de que algo muy bueno estoy por hacer... no por venir, porque lo malo viene, pero las cosas buenas se construyen.

En fin, la onda es que como dice Bunbury



si ya no puede ir peor,
haz un último esfuerzo,
espera que sople el viento a favor...


Yo espero que así sea.


Y ya, tampoco es como que todo en la vida tenga una moraleja, no mamen.

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